Boda dominguera

Despierto entre sueños, y empiezo a caminar...

Cruzo por varios sueños, es difícil elegir.
A lo lejos se ve uno prometedor, me adentro...

Una mujer con las esperanzas puestas en un hombre.
Un hombre con las esperanzas puestas en una mujer.

Quién diría que después de 14 años su sueño se cumpliría.
El sueño de ella, el sueño de la madre de él...

Antes de la ceremonia piensas "¿Qué DEMONIOS hago aquí?" No conoces a los familiares, ni siquiera ubicas al novio, que te han dicho es tu familia. Luego buscas algo interesante, LA VEZ. Es un niña con cara de ángel.

[Piensas: "Qué bien! Alguien con quien platicar que es de tu edad"]

La observas un instante, se vuelve una eternidad, y regresas a la cruda realidad, LA CEREMONIA RELIGIOSA.

La ceremonia comienza, él está nervioso y ella muy segura, soñadora, feliz...
El padre da su sermón, donde les hace jurar que serán fieles, se amarán y estarán en uno para el otro.

[Bonito juramento no lo creen?]

En este juramento se ven puestas todos los cimientos, de lo que la religión expone como un matrimonio que NUNCA SE SEPARARÁ, a menos claro, que la muerte disponga.

Después de su LARGA plática, los novios [perdón, esposos] se retiran para luego alcanzar a los invitados en una modesta y privada recepción. Se acercan dos señoras que aunque no muy grandes, los años han hecho maravillas con ellas. Saludan efusivamente a quienes acompañas y observas como la niña con cara de ángel se acerca.

[Y piensas: "¿Será por mí?"]

Se detiene unos pasos frente a ti...
Ves la oportunidad y te presentas.
La señora, que se presentó como tu tía, rompe ese velo que habías creado hace más de una hora diciendo: "Ah mira! Ella es tu prima"

[Y dices en un susurro imperceptible: "Oh MIERDA!"]

Llegas a la recepción, sólo conoces a tus familiares que acompañas y a esta NUEVA FAMILIA, que hace un par de horas te presentaron.
Te integras, convives y escuchas...
Empiezan a hablar de personas que en tu vida has escuchado, pero dicen ser tus tíos, primos, etc.

[Y piensas: Cuánta familia!

La plática se vuelve interesante, y después de unas horas... llega el brindis.
Y es aquí donde te das cuenta de que desde que empezó la ceremonia a faltado una persona. El ambiente se vuelve triste y melancólico al pararse las hermanas del novio y felicitarlo, pero la voz de una de ellas se quiebra en mil pedazos.
Hace unos años, la madre del novio había muerto. Pero era sueño de ella ver casado a su hijo con la mujer que él tanto ama. Este sueño llevaba 14 años, y ella se fue sin verlo en carne. Aunque dicen las creencias, que nuestros seres amados nos observan y acompañan en nuestro camino.

[ Y la FIESTA comienza!!!]

Las personas bailan, algunos avergonzados otros libremente. Bailas con tías, con primas y con tu amada abuela. Te sientas un rato, tomas un trago y observas...

Las personas están felices, disfrutan la música, disfrutan a los novios con votos renovados. Y piensas que el formalizar una relación [casarse] no puede ser tan malo como lo has visto. Jurarse un amor eterno, inquebrantable, pasional, etc.

[Y el sueño se termina y tienes que regresar...]

Cuando regreso de este sueño, regreso con una actitud reformada, con ánimos de seguir y formar una vidad [que, tal vez, no como la sociedad demande] pero sí una más dichosa en la que se podrá cumplir un sueño o muchos sueños...

Saludos y dulces sueños...