Pages

viernes, 10 de septiembre de 2010

100% fiel, 0% mentiras...

Ja! Sí, como no...

Qué tal? Es hora de levantarse y contar una nueva historia. Ésta, en particular me gustó (eso lo pienso mientras escribo). Comienza así...

Él, hombre conocedor, pero sencillo. Conoce cómo conquistar a una mujer... desde la más mojigata hasta la más zorra. Todos tienen un "modus operandi", todas saben lo que quieren. Pero él, las quiere (o desea). No expresa sentimientos al primer contacto, pero ya formula el cómo le llegará. No siempre es fácil, en esta vida las cosas que cuestan trabajo son las que más se aprecian.

Ella, mujer elegante. Sincera, inteligente y conocedora. Valora a los hombres dependiendo el tamaño de su cartera. Desconoce sentimientos profundos, su máscara preferia es la superficial. Le gustan los regalos costosos y detalles enormes como sus deseos. No se detiene a pensar en las personas.

Ella se dará cuenta de que no todo en esta vida se puede valorar cuantitativamente...

El encuentro. Él camina por las calles con tan sólo $100 pesos en sus bolsillos. Así sean $5 a él no le importa, puede lograr lo que quiere con menos. Sabe hablar y en cada palabra agrega un toque de ternura, ésto porque sabe que a cualquiera le agradan palabras dulces de vez en cuando. Ella preocupada porque se le hace tarde en una cita corre por las oscuras calles.

Clap, clap, clap...
[Resuenan sus tacones en el silencio nocturno.]

Embelesado por la hermosa luna, la admira por hacer que las sombras cobren vida, no se da cuenta de que se dirige en colisión directa con un destino, que al principio dulce... al final, agridulce.

Clap, clap, clap...CRASH!!!

Ella se enoja, la sangre sube a sus pómulos dándole un peculiar rubor en sus mejillas pálidas.

[Él la observa, observa a la luna, a ella, a la luna... está confundido.]

Sabe que mañana no habrá sol si no llega a escupir una palabra en este momento.

Se presenta, pero no sin adjuntar en las palabras un cumplido a su estruendosa belleza. Ella lo observa, se da cuenta que no trae dinero con él, piensa en desecharlo... pero... no quiere? Tal vez quiera jugar un poco? Total, su cita probablemente ya se haya marchado.

[Ella no se percata de su rubor, pero el no puede quitarle los ojos de encima]

Su historia se desarrolla, ella sin pensarlo se empieza a enamorar... aunque lo niega rotundamente, sabe que él es simplemente un juguete en su colección... o tal vez no?

El tiempo pasa, ellos creando castillos en el cielo...

Un nuevo cliente le llega a ella, o tal vez uno viejo? No lo recuerda para ella los hombres son iguales: un cuerpo, una billetera, una noche. Se saludan efusivamente. Le dice, cosas al oido... Lo piensa un momento...

[Sabe que está enamorada del joven que con dulzura y esfuerzo a conquistado su corazón. Pero, no sólo de amor vive el hombre]

Realmente no lo medita tanto, las personas no cambian... NUNCA LO HACEN!

Se va, dejando al pobre joven sumergido en una gran depresión.

[Observa la Luna, reflexiona...]

"Si tanto he dado por una mujer...
El hombre siempre logra superarse...
¿Por qué amargarme por alguien que vale tan poco?
¿Por qué deprimirme por alguien tan aburrida?
Tan aburrida, que al primer cambio (positivo) en su vida,
regresa a las andadas.
PARA QUÉ DETENERSE EN ESAS PERSONAS."

"Vive tu vida, sé feliz! Y si tu camino se entrecruza con otra persona, DISFRUTA Y NO EXIJAS. AMA Y NO QUIERAS. CAMBIA LAS REGLAS, LA REGLA DE ORO ES NO ABURRIRSE."

Saludos y dulces sueños...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido sea tu comentario. Saludos!